el color púrpura
Precio: 9,95€ · Páginas: 224 · Editorial: Debolsillo
Esta es la historia de dos hermanas: Nettie, que ejerce como misionera en África, y Celie, que vive en el Sur de Estados Unidos, casada con un hombre al que odia y abrumada por la vergüenza de haber sido violada por quien cree que es su padre. A lo largo de treinta años ambas mantienen el recuerdo y la esperanza de reencontrarse y vuelcan sus sentimientos en unas cartas conmovedoras. Pero la dramática existencia de Celie cambiará cuando entre en su vida la amante de su marido, una extraordinaria mujer llama Shug Avery.
Alice Walker traza en esta ya clásica historia, narrada en formato epistolar, un crudo y sin embargo bello relato del abuso hacia las mujeres y la comunidad afroamericana en los Estados Unidos de la primera mitad del siglo XX. El relato de ambas hermanas, merecedor del Premio Pulitzer y del National Book Award en 1983, se convierte en símbolo de una lucha que aún a día de hoy no hemos acabado de librar.
🏚💜🌾
¡Hola, hola!
hoy os traigo la reseña del libro que leímos en febrero de este año y del que, por alguna razón, he olvidado hacer la reseña más completa.
En El color púrpura nos encontramos, principalmente, con la historia de Celie, quien escribe cartas dirigidas a dios y a su hermana Nettie.
En las primeras páginas conocemos un poco la vida de la protagonista, vemos cómo le es arrebatada su niñez de una forma imperdonable. El maltrato y los abusos son algo muy frecuente en la vida de Celie. Pronto nos damos cuenta que es una historia donde la vida de los personajes no es de color rosa.
Tras la muerte de su madre, Celie es obligada a casarse con Albert, un viudo que más bien está interesado en su hermana, pero que se conforma con ella a regañadientes. A pesar de dejar el hogar familiar, los maltratos y vejaciones continuan con su marido despiadado y los hijos de este.
Lo único bueno de la vida de Celie son los momentos que su hermana la visita, pero eso dura poco, porque Nettie también se ve obligada a huir de los abusos de su padre y de Albert. Ante su marcha, Celie le pide a Nettie que le escriba, pero nunca recibe una carta de ella. Aunque más tarde sabremos porqué no recibe ninguna carta suya.
Poco tiempo después, aparecerá una mujer que hará que la vida de Celie cambie. Shug Avery, extraoficialmente, es la amante de Albert, una mujer de quien siempre ha estado enamorado. Pero, sobre todo, es una exitosa cantante de Jazz. Shug está enferma, así que Albert la lleva a su casa unos días para que se recupere y Celie es la encargada de su cuidado.
Celie ve en Shug todo lo que ella no es, una mujer fuerte e independiente, bonita, decidida, y capaz de someter a Albert a sus deseos.
Al principio, la relación de ambas no es buena, pero poco a poco entre ellas se creará un vínculo muy especial. Antes de su marcha, una vez recuperada, Celie le cuenta a Shug todos los tormentos por los que la hace pasar Albert. Shug comprende todo y obliga a prometerle a Albert que no tratará a Celie de mala manera.
Durante otra visita, Shug trae a su nuevo marido Grady, y es en esta ocasión cuando descubre que Albert ha ocultado una información muy valiosa para Celie. Es así como descubren que su hermana ha estado viviendo en África trabajando como misionera con un reverendo, su esposa y sus hijos.
Celie, muy enfadada, decide dejar a Albert de una vez por todas, él intenta impedírselo pero ella se mantiene decidida y se marcha con Shug a una nueva vida.
Nuestra protagonista emprende un nuevo viaje hacia Memphis acompañada de Shug, allí creará un pequeño negocio como diseñadora de pantalones. Poco después se muda a su antigua casa familiar, donde descubre más secretos familiares.
La última parte del libro es para mí lo mejor. Simplemente no me lo esperaba. Y eso ha hecho que me dejara con un sentimiento de felicidad absoluta. Ha sido el cierre perfecto para esta historia.
Como personajes secundarios están Harpo, el hijo mayor de Albert, que se enamora de Sophia, una chica fuerte e independiente que no cree en un matrimonio donde tenga que doblegarse ante su marido, ni dejarse maltratar. Posteriormente, forman una familia, pero se acaban separando por todos los problemas de convivencia, Sophia se marcha con sus hijos a casa de una hermana suya.
La historia está contada de forma epistolar en cartas escritas por las dos hermanas. Esto hace que la novela tenga un lenguaje un tanto inusual, pero no por ello hace difícil su lectura, sino lo contrario, nos deja echar un vistazo a la vida de ambas hermanas de forma que se conozcan ambas historias.
Este libro me ha sorprendido mucho, partimos desde la base de que nuestra protagonista ha sufrido abusos desde su niñez, durante su juventud, hasta que emerge de toda esa oscuridad en la que ha vivido durante casi toda su vida. La evolución de Celie es digna de admiración por la fuerza que transmite, por la valentía que la hace dejar de estar oprimida y sumisa.
La historia, más allá de tratar la superación personal y espiritual, habla de temas muy importantes como la identidad étnica y de género, la religión, el machismo, la colonización que sufrió África en esa época.
En El color púrpura nos encontramos, principalmente, con la historia de Celie, quien escribe cartas dirigidas a dios y a su hermana Nettie.
En las primeras páginas conocemos un poco la vida de la protagonista, vemos cómo le es arrebatada su niñez de una forma imperdonable. El maltrato y los abusos son algo muy frecuente en la vida de Celie. Pronto nos damos cuenta que es una historia donde la vida de los personajes no es de color rosa.
Tras la muerte de su madre, Celie es obligada a casarse con Albert, un viudo que más bien está interesado en su hermana, pero que se conforma con ella a regañadientes. A pesar de dejar el hogar familiar, los maltratos y vejaciones continuan con su marido despiadado y los hijos de este.
Lo único bueno de la vida de Celie son los momentos que su hermana la visita, pero eso dura poco, porque Nettie también se ve obligada a huir de los abusos de su padre y de Albert. Ante su marcha, Celie le pide a Nettie que le escriba, pero nunca recibe una carta de ella. Aunque más tarde sabremos porqué no recibe ninguna carta suya.
Poco tiempo después, aparecerá una mujer que hará que la vida de Celie cambie. Shug Avery, extraoficialmente, es la amante de Albert, una mujer de quien siempre ha estado enamorado. Pero, sobre todo, es una exitosa cantante de Jazz. Shug está enferma, así que Albert la lleva a su casa unos días para que se recupere y Celie es la encargada de su cuidado.
Celie ve en Shug todo lo que ella no es, una mujer fuerte e independiente, bonita, decidida, y capaz de someter a Albert a sus deseos.
Al principio, la relación de ambas no es buena, pero poco a poco entre ellas se creará un vínculo muy especial. Antes de su marcha, una vez recuperada, Celie le cuenta a Shug todos los tormentos por los que la hace pasar Albert. Shug comprende todo y obliga a prometerle a Albert que no tratará a Celie de mala manera.
Celie, muy enfadada, decide dejar a Albert de una vez por todas, él intenta impedírselo pero ella se mantiene decidida y se marcha con Shug a una nueva vida.
Nuestra protagonista emprende un nuevo viaje hacia Memphis acompañada de Shug, allí creará un pequeño negocio como diseñadora de pantalones. Poco después se muda a su antigua casa familiar, donde descubre más secretos familiares.
La última parte del libro es para mí lo mejor. Simplemente no me lo esperaba. Y eso ha hecho que me dejara con un sentimiento de felicidad absoluta. Ha sido el cierre perfecto para esta historia.
Como personajes secundarios están Harpo, el hijo mayor de Albert, que se enamora de Sophia, una chica fuerte e independiente que no cree en un matrimonio donde tenga que doblegarse ante su marido, ni dejarse maltratar. Posteriormente, forman una familia, pero se acaban separando por todos los problemas de convivencia, Sophia se marcha con sus hijos a casa de una hermana suya.
La historia está contada de forma epistolar en cartas escritas por las dos hermanas. Esto hace que la novela tenga un lenguaje un tanto inusual, pero no por ello hace difícil su lectura, sino lo contrario, nos deja echar un vistazo a la vida de ambas hermanas de forma que se conozcan ambas historias.
Este libro me ha sorprendido mucho, partimos desde la base de que nuestra protagonista ha sufrido abusos desde su niñez, durante su juventud, hasta que emerge de toda esa oscuridad en la que ha vivido durante casi toda su vida. La evolución de Celie es digna de admiración por la fuerza que transmite, por la valentía que la hace dejar de estar oprimida y sumisa.
La historia, más allá de tratar la superación personal y espiritual, habla de temas muy importantes como la identidad étnica y de género, la religión, el machismo, la colonización que sufrió África en esa época.
En conclusión, El color púrpura es una historia increíble con unas mujeres llenas de coraje y valentía. La protagonista que después de pasar por todo un caos sigue en pie, resistiendo y luchando por ser independiente. Es un libro duro, pero se disfruta y se aprecian las cosas buenas que le pasan a las protagonistas de vez en cuando.«Hay una niña africana que se llama Tashi que juega con Olivia después de las clases. ¿Por qué no puede venir Tashi a la escuela?, me preguntó un día; cuando le expliqué que los olinka piensan que no se debe educar a las niñas me dijo rápida como un rayo: son como los blancos de nuestro país que no quieren que los negros aprendan.»
—Nettie.
Muy pocas veces le doy 5 estrellas a un libro, pero este las tiene bien merecidas. No por nada ha recibido numerosos premios y ha sido adaptado a la gran pantalla. Tengo que decir que hasta día de hoy no me animo a mirar la película, porque sé que voy a sufrir por ver en imágenes todo lo que leí. Si no lo habéis hecho todavía, tenéis que leer esta novela, es magnifica.
Contadme, ¿la habéis leído o visto la película?
¡Feliz lunes!
Os leo ♥︎
gracias a Parada Lector por el ejemplar.
—Paula.
Hola, antes de irte, ¿y si dejas un comentario? Tu opinión es muy importante para mi. ♥